Seguidores

Si la vida te da la espalda, hazte una limonada

lunes, 4 de junio de 2012

Cuando menos te lo esperes

Si algo me ha quedado claro a lo largo de mi corta vida, es el hecho de que nada, absolutamente nada puede planearse. Con la experiencia compruebas que todo lo que das por hecho, todo lo que planificas en el 80% de los casos sale mal. Puedes emocionarte o ilusionarte pensado, imaginando todo lo que puede llegar a ser, las cosas que podrás hacer, lo que te comprarás, las fotos que harás, los besos que darás, los abrazos, la primera vez, la segunda, la tercera...ese gran viaje, esa gran fiesta, ese chico fantástico, ese amor platónico...
La vida está llena de suposiciones, nunca paramos de pensar, de estructurar, de organizar, de diseñar nuestra vida segundo a segundo, nunca nos tomamos un descanso. Siempre calculando e ideando para que tengamos una existencia perfecta. Y como es lógico, al final siempre acabamos rotos o destrozados al ver que nada ha pasado como queríamos. Deseábamos el amor de ese chico y quizá por tu propia culpa, por esos sentimientos que no puedes cambiar aunque quieras ya no hay nada. Imaginábamos ese viaje ideal, y por unas cosas o por otras se suspende. Creo en el destino, y por eso, he aprendido que no puedo fantasear con cosas que pueden o no suceder, dejaré que todo, absolutamente TODO siga su curso. Si tiene que pasar, pasará. Y al cien por cien segura de que será, sin duda...cuando menos te lo esperes.






NO WOMAN NO CRY

Deberíamos buscar a aquel chico que nos estropeé el pintalabios y no el rimmel.